Contra punto

AMLO le declaró la guerra a quién pudo ser su mejor aliado

Por Levi Cruz

Desde que el actual presidente de México buscó la silla presidencial en 2006 y posteriormente en 2012, es de conocimiento público que los medios de comunicación no siempre se han referido a él como un personaje ejemplar, por así decirlo. Sin embargo, desde su llegada al poder, Andrés Manuel tuvo la oportunidad de reconciliarse con los medios y, de esta forma, curar la mala imagen que tornaba previamente sobre él; no obstante, decidió declararles la guerra.

Al igual que otros presidentes, AMLO también tuvo la oportunidad de legitimar su poder (aunque no hacía falta) para terminar de convencer a los inconformes y tener a todos de su lado. Enrique Peña Nieto lo hizo encerrando a Elba Ester Gordillo, Felipe Calderón decidió ir tras el “crimen organizado”, y así una lista larga de presidentes y legitimaciones.

Obrador tuvo su legitimación frente a sus ojos todo el tiempo. En lugar de recortar el 50 por ciento en gasto de publicidad oficial, se tuvo que incrementar a favor de éste, y así asegurar con mejor aprobación ciudadana sus proyectos e, incluso, su puesto en la presidencia dos años después.

La austeridad no siempre es mala, pero no se puede ser austero con todos los sectores en el país, y menos con quienes pueden ser “tus mejores aliados”. Prueba de ello es el gobierno de Peña Nieto, que gastó durante su sexenio 52 mil 585 mdp en publicidad y los medios apenas le mencionaban, y si lo hacían era para alabar sus acciones. El gobierno de López Obrador tan sólo ha gastado 4 mil 711 mdp, una cifra minúscula comparada con el mandato anterior, pero eso sí, lleno de críticas a su figura.

¿Y qué hubiese pasado si Andrés Manuel no decidiese haber recortado este gasto?

La respuesta es que probablemente el cierre y cambio del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México en Texcoco a Santa Lucía no habría resultado en toda una telenovela, se hubiese hecho, quizá, con una que otra protesta, pero al final llevado a cabo. El proyecto del Tren Maya no hubiese sido calificado como anti-ecologista, y después de meses de enfrentamiento con pro-ambientalistas, se estaría llevando a cabo.

Otra prueba de esto es lo acontecido cuando Enrique Peña Nieto encerró a Elba Ester, pocos se atrevieron a mencionar el robo de las elecciones y de su bajo coeficiente intelectual. A Calderón le celebraron la “guerra contra el narcotráfico”, que después se comprobó hubo personas inocentes muertas en medio de estas luchas.

Las conclusiones de todo esto, es que la prensa te puede hacer un héroe o un villano dependiendo de si sus interés son saldados por el gobierno en turno. Los villanos resultaron héroes y los héroes ahora sin villanos. Quizá López Obrador le declaró la guerra a quién pudo haberle puesto en lo más alto del podio y ahora estaría en peligro su presidencia, y con ello, sus proyectos.