Blancos fáciles para el ciber crimen

Por Levi Cruz

A través de los años, la palabra “seguridad” se ha vuelto un común denominador en nuestro entorno, llámese familia, amigos, conocidos, etc. Sin embargo, este tema ha derivado en diferentes vertientes que han afectado nuestra sociedad en un sinfín de maneras. Tal es el caso de la ciber delincuencia, un fenómeno aparentemente nuevo que ha ido en ascenso en los últimos años debido a que, en nuestro país, no existe una cultura sobre cómo cuidar la información personal en el ciber espacio, puesto que es fácil entrar a diferentes portales y compartir datos sin saber a quién los estamos enviando.

Foto: TICBeat

Otro factor que contribuye a formar parte de esta estadística es el crecimiento exponencial de la tecnología, puesto que ésta ha obligado a gran parte de la sociedad adulta a adaptarse a las nuevas tecnologías de la información de una manera vertiginosa, dejando un margen muy estrecho a la adaptación correcta de

este sector que procede de una generación donde la tecnología no era tan importante como lo es hoy en día, convirtiéndolos en un blanco fácil a los ciberdelincuentes.

Los pasos agigantados en el crecimiento de la tecnología no sólo benefician en las labores de todos los que dependen de los gadgets, ya que estos también pueden funcionar como un arma de doble filo. A inicios de la década de los 90, los foros de discusión comenzaron a expresar una misma opinión dentro de la esfera pública correspondiente, reportando y exigiendo mayor seguridad en portales de internet, así como en los nuevos dispositivos de aquel entonces, ya que los delitos criminales comenzaron a crecer exponencialmente.

Los países desarrollados fueron los primeros en notar esta situación, si bien es cierto que están en la cúspide del desarrollo tecnológico, también es cierto que están más vulnerables a los atacantes del ciber espacio. Tales sucesos hicieron que los primeros esfuerzos por combatir esta problemática surgieran en los EU con la empresa llamada Computer Fraud and Abuse Act en 1986, sim embargo, perdieron fuerza puesto que sus esfuerzos iniciales sólo estaban concentrados en el sector doméstico, dejando descuidado al sector empresarial, y más aún, cuando las amenazas cibernéticas empezaron a llegar del extranjero.

Ante la necesidad por responder a estas amenazas y cerrar filas ante las amenazas del ciber crimen, el Consejo de Europea tomó las riendas de la situación para que, en 1995, se creara un comité de expertos en seguridad informática y de la mano con ellos, se emitieran recomendaciones sobre seguridad. Posterior a esto y eventualmente, se aprobaron y firmaron los acuerdos de Budapest no sin antes estar censurados durante cinco años. En ellos se hace énfasis a estandarizar el sistema penal de los países en contra de estos delitos y a unir fuerza, internacionalmente hablando, para hacerle frente a esta problemática.

Para hacerle frente a estos hechos, México ha desarrollado el mayor Centro de Ciberseguridad y Ciberinteligencia de América Latina en el cual, detienen miles de intentos de ataque diariamente, así como proteger entornos digitales de empresas que resguardan información importante. Trabajando de la mano con TELMEX-SCITUM en este ciberecosistema, se encuentran el CERT-MX, la División Científica de la Policía Federal, UNAM-CERT, la Unidad de Crimen Digital de Microsoft, entre otros.

Según datos del Instituto Federal de Telecomunicaciones, al final del 2018, ya se cuentan 120 millones de líneas celulares, el 54% de los hogares tiene internet fijo. Por otra parte, México tiene una cobertura del 87% de banda ancha en el territorio nacional y cuenta con 61 millones de usuarios de Facebook, siendo el 5º país con más usuarios de esta red, por lo que en México ya una gran parte de nuestra vida social, económica y política está expuesta a todo tipo de delitos cibernéticos.

Este creciente número de usuarios en el ciberespacio, también crecen los ciber ataques en nuestro país. Y para plantar cara a estos hechos, algunas entidades federativas del país han legislado al respecto, por ejemplo, la CDMX (artículo 336 del nuevo código penal de la Ciudad de México), Estado de México (artículo 174 del código penal del Estado de México), entre otros. Mientras que a nivel nacional, el actual código penal, sanciona la revelación de secretos, acceso ilícito a equipo y sistemas de informática, así como los delitos contra derechos de autor.

Según información obtenida en la revista Forbes, México es el quinto país en América Latina con más ciber ataques, pero todo esto obedece a una razón en específico. En palabras de Jorge Miranda, director de Ventas Regionales de Fortinet México, existe un pensamiento que predomina en la población mexicana y es que creemos que estamos exentos de esta clase de ataques; sin embargo, estos pueden realizarse a niveles tan bajos que no nos percataríamos que están sucediendo. No usar antivirus en los dispositivos móviles, conectarse a redes wifi-públicas, visitar portales poco apropiados y abrir links desconocidos, son las puertas para el robo de identidad y de información bancaria, entre otros delitos.

Si bien, la expansión vertiginosa en la tecnología no hace sino aumentar cada vez más, también va dejando atrás a personas que no han tenido la oportunidad de adaptarse a este cambio. Tal es el caso de los adultos mayores, quienes según la psicóloga Ginnie Hughes, vivieron en una época distinta y no sólo deben adaptarse a los cambios de la edad, sino también de las nuevas tecnologías que van más rápido de lo que ellos pueden asimilar.

También asegura la psicóloga para el portal de noticias “La Prensa”, que: “La personalidad, la resistencia natural al cambio, la falta de conocimiento y el hecho de que los aparatos no estén acondicionados a sus capacidades limitadas debido a la edad, como la visión, el equilibrio y la coordinación con los dedos, son factores que influyen en que muchos queden excluidos del uso de nuevas tecnologías”.

En México sólo tres de cada 10 adultos mayores tienen un acercamiento con algún dispositivo inteligente que les brinda conexión al ciber espacio, y esto debido a que alguien más se los obsequió, según datos del Pew Research Center. Y si coadyuvamos las limitaciones de las personas adultas con la falta de cultura para navegar en el ciber espacio, se puede obtener como resultado un blanco ideal para los ciberdelincuentes. Pero no sólo ellos son blancos más fáciles que otros, puesto que cualquiera que no posea la cultura suficiente puede ser víctima de estos atacantes; mejor tomemos conciencia y evitemos las malas prácticas dentro de este mundo.