UNA NOCHE TOTALMENTE CEMENTERA
- Nota a nota
- 11 jul 2020
- 2 Min. de lectura
Por: Liz González
El clásico joven no podía faltar en la Copa GNP y esta tarde se llevó a cabo en el cierre de grupos de la primera fase de dicho torneo; ambos equipos llegaban con buenos resultados, el América con un triunfo y un empate, mientras que Cruz Azul llegaba con dos victorias.
El partido comenzó con mucho ritmo, como es costumbre en los encuentros de este clásico, al minuto 13, los azulcremas se hacían presentes en el marcador con un gol de Francisco Córdova, el equipo de “el piojo” Herrera, crecía al paso de los segundos y ligeramente iba ganando la posesión del esférico.
Una llegada con peligro de Giovanni dos Santos dejaba claro que los de Coapa dominaban el juego, aunque el marcador seguía igual; al minuto 38 la máquina consigue un tiro de esquina que culmina con un autogol por parte de Federico Viñas que rompía con el ritmo del América. El cierre del medio tiempo terminó con un Cruz Azul motivado y con un ligero dominio del juego.

La segunda mitad inició con unos cementeros renovados, llenos de energía y con ganas de hacer suyo el partido, lo cual se vio reflejado en el marcador cuando al minuto 46 el “cabecita” Rodríguez clava su gol en la portería de Guillermo Ochoa.
Los minutos pasaban y la máquina cementera iba hacia delante, al minuto 53 se vuelve a hacer presente con un gol de Alexis Gutiérrez; el América a penas se estaba recuperando, cuando Orbelín Pineda le da el cuarto gol a los cementeros con lo que demostraban su buen futbol.
El reloj marcaba los 70 minutos y el partido se pintaba totalmente de azul, el equipo de Coapa parecía que poco a poco iba desapareciendo del juego, por más que intentaba despertar no podía alcanzar el ritmo que su contrincante poseía.
El juego se convirtió en una cascarita para el Cruz Azul, quien cómodamente estaba en un entrenamiento más, no le daba oportunidad alguna a los azulcremas, se paraban bien en el terreno de campo con el fin de defender el marcador y que no se moviera en su contra. Casi al final del encuentro América obtenía un tiro de esquina que significaba una pequeña luz dentro de la oscuridad que había sido este partido, pero sólo quedó en eso, sin mayor problema para el portero de la máquina.
Definitivamente la noche fue cementera, una vez más el equipo comandado por Robert Dante Siboldi demostró que tiene muy buen nivel, que está en su momento, culmina este encuentro con la cara en alto y motivado para encarar la siguiente fase del torneo.
Comments