Un pajarillo me dijo...

Por Levi Cruz

John Katzenbach es uno de los mejores escritores en cuanto a temas de suspendo se refiere. Es autor de los bestseller como: El Psicoanalista, Juegos de Ingenio, El Final Perfecto, etc. Y su paso por por el mundo de las letras no pasó desapercivido. Fue periodista hasta el año de 1987 para después dedicarse a la escritura. Hizo colaboraciones para el New York Times, Washinton Post y fue cronista para el The Miami Herald.

Foto: elpendulo.com

Su libro, La Historia del Loco, no es la excepción en su amplio repertorio. Cuenta con 540 páginas, fue publicado en 2004 por la editoria Zeta Bolsillo.

Francis cuanta la historia que vivió en aquel hospital psiquiátrico, escribiendo en las paredes de su apartamento todo lo acaecido en aquel lugar hace 20 años. Aquel lejano recuerdo está solamente en el pasado, pero algo hizo remover la mente de “pajarillo” (como lo llamaba su amigo, el bombero).

Dos décadas atrás, los padres de Francis decidieron internarlo en el Western State Hospital, ya que su conducta no era normal y refería que escuchaba voces dentro de su cabeza. Una vez dentro del WSH, conoce a Peter, un hombre que no presenta ningún desorden metal, pero su reclusión en este sitio fue debido a la decisión de la corte por asesinar a un hombre.

En una de tantas noches tranquilas en el hospital, una enfermera es brutalmente asesinada por alguien. Ahora todos en el hospital son sospechosos del asesinato de la enfermera y “pajarillo” también lo es, no obstante, echará mano de la poca cordura que tiene para encontrar al verdadero asesino.

La policía no deja pasar este incidente e introduce en el hospital a una de sus mejores detectives: La Fiscal. Esta mujer aprovechará la presencia de Peter “El Bombero” y de Francis para encontrar al asesino de la enfermera. Sin embargo, nadie parece haber tenido algo que ver en este asunto, todos tienen la coartada para aquella noche.

Las investigaciones no pasan desapercibidas para el verdadero asesino, ya que éste decide hacerle una pequeña visita a Francis y dejarle en claro que no sigan investigando. Al contarle esto a sus compañeros de investigación, deciden no creerle, al final de cuentas, era uno de varios “locos” en aquel lugar.

Sólo “pajarillo” y “el bombero” son capaces de descubrir la verdad en aquel hospital.