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Greyhound, la imperdible batalla naval

Por Levi Cruz


Es el año de 1942 y la Segunda Guerra Mundial está en lo más alto de su apogeo. El océano Atlántico es el lugar dónde una de las batallas militares y navales se llevó a cabo. Ahora Tom Hanks no solamente es el encargado de darle vida al personaje protagónico (Ernest Krause), sino que también se consolida como el guionista del filme, basándose en la novela "The Good Shepherd", de C.S. Forester.

Además de Hanks, Greyhound se conforma por el director Aaron Schneider y producida por Gary Goetzman. También podemos encontrar a actores como Stephen Graham (The Irishman, Boardwalk Empire), Rob Morgan (Mudbound, Godless) y Elisabeth Shue (The Boys, Leaving Las Vegas) que comparten pantalla con Tom.


El filme tiene una duración de 90 minutos, sin embargo, la mayor parte la película está centrada en un solo escenario, la mar. Es en ese lugar donde el capitán Ernest Krause ha sido elegido para comandar a una flota de 37 barcos que buscan cruzar de Estados Unidos hacia Reino Unido.


No obstante, el cruce por el océano Atlántico es uno de los más peligrosos para hacer este tipo de viaje, ya que en las profundidades aguardan los temidos submarinos alemanes U-boats. Y no era para menos, debido a que las bajas causadas fueron múltiples: 3 mil 500 barcos mercantiles hundidos, 175 buques de guerra destruidos y 72 mil soldados muertos.


Los alemanes tienden una trampa al capitán Ernest, mandando un submarino de anzuelo para separarlo del grupo. El capitán cae en la trampa pero gracias a esto, se percata que es acechado por cinco submarinos que amenazan con hundirle a él y a su tropa y sin apoyo aéreo que los respalde, el camino de cinco días hasta Inglaterra parece eterno.


A pesar de ser el primer barco que capitanea, Krause hace gala al tomar las mejores decisiones para su tripulación, así como encargarse de la logística de navegación para no ser impactado por ningún torpedo y esquivar todos los ataques enemigos que le salen al paso durante su trayecto.


Sin dormir, con escasa munición, poco combustible y sin tregua alguna, Krause logra hacerles frente a cuatro de los cinco submarinos alemanes que están tras su nave. Durante el trayecto, Ernest tiene que presenciar los estragos de la guerra y ver como sus amigos han caído a causa del ataque enemigo. Sin embargo, su habilidad comandando la nave, le permite ganar tiempo para que el apoyo aéreo le ayude destruyendo el último U-boats y llegar a salvo a Inglaterra.


El filme está lleno de acción de principio a fin, la tensión de la situación te lleva a sentirte como si fueras un miembro más de la tripulación. Los efectos especiales permiten ver a gran detalle cómo es que las batallas de aquellos tiempos se llevaban a cabo. Si eres un fanático del cine de guerra, esta es tu película, además que está llena de lenguaje técnico para llevarte de la mano por la batalle y te sientas un triunfador al terminar el filme.

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